Cuando las oficinas reabran en medio del covid-19 enfrentarán nuevos desafíos

• Los empleados discutirán por las mascarillas, entre otras cosas:

CONFLICTO

• Los empleados que estén volviendo al lugar de trabajo se enfrentarán por los puntos de vista diferentes sobre la pandemia.

• La experiencia actual es que algunos trabajadores no dudan en enfrentar a aquellos compañeros cuyo enfoque de la pandemia ellos consideran inaceptable.

Las tensiones van en aumento en los lugares de trabajo a medida que las personas marcan diferencias sobre los resguardos que deben adoptar para evitar el contagio.

Cuando Matt Wells volvió a la oficina a mediados de abril, se sorprendió al ver una nota que estaba pegada en el cubículo de un colega en la que se instaba a las personas a que mantuvieran su distancia.

"Pensé que era una reacción exagerada" a la pandemia de coronavirus, comentó.

Ahora él tiene una nota exactamente igual en su cubículo. También puso una cadena de clips en la entrada de este para evitar que los visitantes pongan un pie adentro.

Wells, un empleado público de 33 años de Phoenix, tomó la medida después que otra compañera irrumpió y se inclinó sobre su hombro para mirar en la pantalla de su computador. En ese momento no se exigía el uso de mascarillas en la oficina y ninguno de los dos tenía una. "Ella estaba tan cerca que podía sentir el olor de su chicle", contó.

Al levantarse el confinamiento, los empleados que están volviendo al lugar de trabajo -como también aquellos que nunca se fueron- se están enfrentando por los puntos de vista diferentes sobre la pandemia.

Algunos dicen que sus compañeros no lo están tomando en serio; otros sostienen que sus compañeros están yendo demasiado lejos para sentirse seguros.

La desconexión, a menudo cargada de connotaciones políticas en un año electoral, está creando tensión mientras la cantidad de casos de coronavirus en EE.UU. sigue subiendo.

Opiniones opuestas

"Igual como podríamos tener amigos o familiares con opiniones que son totalmente opuestas a las nuestras, lo mismo se puede esperar del lugar de trabajo", explicó Katie Brennan, asesora de Society for Human Resource Management, un grupo de defensa.

Prepárese para un conflicto potencial, indicó, porque sentirse seguro o cómodo en el trabajo "no es algo que una mayoría de personas esté dispuesta a transigir''.

Lori Webb, de 61 años, se ha peleado por el coronavirus con un compañero en la planta manufacturera en Salt Lake City donde trabajan. Esta persona le dijo que no cree que sea gran cosa, contó Webb, y ella no está de acuerdo. Le preocupa que la posición de su compañero implique que no practica el distanciamiento social fuera del horario de trabajo y esté poniendo en peligro la salud de ella y de la de su madre de 86 años, con quien vive. "No quiero traer nada a casa", expresó Webb.

Principalmente, los empleados no tienen recursos legales contra los compañeros que ellos creen que no están haciendo lo suficiente -o lo opuesto, exagerando- para impedir la propagación del patógeno, señaló la profesora de la Escuela de Derecho de Stanford, Alisan Morantz. Pero eso podría cambiar, en vista de que la pandemia es algo sin precedentes en nuestros días. "Quizás surjan nuevas leyes de los estados o teorías legales creativas", agregó. "Este es un territorio desconocido".

Por ahora, algunos trabajadores están tomando cartas en el asunto. Ushyra Raymond, estudiante de la Universidad de Oklahoma, hace poco se encontró compartiendo una oficina en la escuela con otra estudiante que rociaba Lysol y desinfectaba las superficies cada 5 a 1 O minutos. Incluso con una mascarilla puesta, "aspiraba el Lysol", aseguró Raymond, de 20 años.

La misma compañera desplegó en su pantalla del computador un sitio web con los recuentos más recientes de infecciones y muertes de coronavirus, recordó Raymond. El sombrío ritmo de la mortandad de la pandemia combinado con la limpieza frecuente "me sacaron de quicio", contó.

Raymond finalmente le pidió a la compañera que redujera la desinfección, mientras le explicaba que sufría de asma, y ella aceptó. Optó por no mencionar el sitio web, no obstante, para reducir al mínimo la fricción. "Si no tuviera que verla constantemente, el tono que adopté podría haber sido diferente", reconoció. "Quiero que las cosas se mantengan cordiales".

Algunos trabajadores no dudan en enfrentar a aquellos compañeros cuyo enfoque de la pandemia ellos consideran inaceptable. "Si alguien no está usando su mascarilla, yo soy la persona que dice: '¡Póngase de nuevo su mascarilla, por favor!"', contó Yaniz Seeley, enfermera de 27 años en Chattanooga, Tennessee.

La mayoría de los colegas cumple, pero una recepcionista en una clínica donde Seeley a veces trabaja se negó, y dijo: "Si es mi hora de morir, entonces llegó mi hora de morir", recordó.

Seeley señaló que reportó a la recepcionista a su supervisor.

No todo el mundo está cómodo levantando la voz. A Steven Hunnell, empleado de supermercado en lndianápolis, no le agrada que algunos compañeros se saquen sus mascarillas cuando no hay clientes cerca, pero no interviene. "Me mirarían como a un soplón", dijo.

Cómo manejar una disputa

Algunos trabajadores sostienen que la mejor solución es evitar a los compañeros con quienes no se está de acuerdo. Tom Whaley, empleado de una bodega en Northfield, Nueva Jersey, trata de mantenerse a una distancia de un metro 80 más o menos de sus colegas en todo momento.

Lidiar con un compañero cuya respuesta a la pandemia es contraria a la suya es desafiante, porque la relación es continua, observó Kirk Snyder, profesor de comunicaciones en la Escuela de Negocios Marshall de la Universidad del Sur de California. "Estamos hablando del lugar de trabajo y no del supermercado", precisó.

Snyder recomienda primero tratar de entender la perspectiva de su compañero en vez de exigir un cambio de comportamiento. Algunas personas podrían adoptar una posición relajada, porque no conocen a nadie que se haya infectado, mientras que otras pueden ser extremadamente cautas porque tienen una condición de salud que las vuelve más vulnerables.

Básese en hechos para evitar ser víctima de la exageración y la emoción, y considere hablar con su administrador o un jefe de recursos humanos si no existe ninguna posibilidad de tener una discusión racional con el compañero, agregó Snyder. Si eso no resulta, considere buscar un nuevo empleo donde se sienta valorado, y mientras tanto trate de juntarse con compañeros que tengan su mismo punto de vista", concluyó.

FUENTE: El Mercurio
Fecha: 22-07-2020