Del cuidado de la salud
Por qué cuesta mantener el peso después de una dieta exitosa
- Investigación realizada por el Instituto ETH Zurich, publicado en la revista Nature, identifica los factores fisiológicos que dificultan mantener el peso en personas con tendencia al sobrepeso.
El estudio muestra que los adipocitos mantienen marcadores químicos que establecen una «memoria» de las células grasas que conservan un patrón epigenético que predispone a recuperar peso, incluso tras una cirugía bariátrica.
De esta forma las células adiposas «recuerdan» el estado de sobrepeso y pueden volver a él con mayor facilidad.
Metabolismo adaptativo
Al perder peso, los adipocitos se hacen más pequeños, pero su cantidad no disminuye. Estas células envían señales al cerebro aumentando el hambre.
Dado que durante la pérdida de peso, el metabolismo se reduce para conservar energía, el cuerpo percibe la pérdida de peso como un estado de alerta o «supervivencia», enviando señales de más hambre y disminuyendo el gasto calórico.
En el proceso adaptativo el hipotálamo coordina señales de hambre y saciedad, haciendo más apetitosos ciertos alimentos tras la pérdida de peso.
Factores conductuales
Influenciados por estímulos emocionales las personas desarrollan comportamientos extremos como comer poco, pero repetidamente varias veces al día, o comer en exceso, de una sentada, alimentos que resultan gratos y satisfactorios.
Enfermedad crónica
Los investigadores señalan que la tendencia al sobrepeso y la obesidad deben ser entendidos como una enfermedad crónica que se ve afectada por un proceso natural llamado efecto rebote, que dificulta mantener el peso perdido sin un tratamiento prolongado.
No es culpa de la persona
El cuidado a largo plazo y estrategias médicas son esenciales para evitar la recuperación de peso, dado que la recuperación de peso no es culpa de la persona, sino de la fisiología, por lo que se da una necesidad de apoyo constante.
Recomiendan buscar un apoyo multidisciplinario con nutricionistas, médicos y psicólogos para abordar la modificación de comportamientos alimenticios descontrolados y mantener un monitoreo constante del metabolismo para adaptar planes nutricionales a los cambios metabólicos.
Piden reactivar discusiones de Ley del Tabaco
- En conversatorio “La gran deuda de Chile con el cáncer de pulmón”, organizado por la Fundación Arturo López Pérez (FALP) y Tabaconomía de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI), la diputada Helia Molina y el senador Juan Luis Castro, subrayaron la urgencia de acciones legislativas y preventivas para reducir el impacto del consumo de tabaco en la salud pública.
Cáncer de Pulmón
Según Globocan, el cáncer de pulmón es la principal causa de muerte por cáncer a nivel mundial y en Chile lo son una de cada cinco muertes por cáncer con proyecciones de cerca de 4,000 decesos anuales, con una alta tasa de mortalidad debido al diagnóstico tardío.
En el continente americano hay 122 millones de fumadores y más de un millón de muertes anuales, lo que equivale a una muerte por consumo de tabaco cada 34 segundos.
Reactivar la Ley del Tabaco
Propuesta por la diputada Helia Molina, contempla reactivar la discusión parlamentaria sobre la Ley del Tabaco, en espera de modificaciones hace más de una década, y que se incluyan modificaciones para proteger a la infancia y adolescencia, como estrategia clave para prevenir el cáncer.
Existiría consenso en la Comisión de Salud para buscar acuerdos sobre el Aumento de impuestos al tabaco que es identificada como la medida más costo-efectiva para reducir el consumo.
Campañas educativas y preventivas
Los participantes destacaron la necesidad de
- Incentivar el cese del tabaquismo como estrategia clave para prevenir el cáncer.
- Promover un compromiso colectivo para reducir el consumo de tabaco en Chile.
- Regular el uso de vapeadores y cigarrillos electrónicos.
- Combatir el comercio clandestino de cigarrillos.
- Mejora en la atención y diagnóstico precoz de pacientes.
Opciones en Chile para dejar de fumar
- Chile ofrece diversas herramientas para combatir el tabaquismo en el que la combinación de tratamientos psicológico y farmacológico suele ser la estrategia más efectiva y la clave radica en la personalización del tratamiento y el apoyo del entorno.
Tratamiento psicológico y apoyo conductual
Terapia Cognitivo-Conductual (TCC)
- Ayuda a cambiar patrones de pensamiento y comportamiento relacionados con el tabaquismo.
- Refuerza la motivación, la toma de decisiones y previene recaídas.
- Es especialmente efectiva cuando se combina con terapias de reemplazo de nicotina.
Apoyo del entorno
- Es fundamental que la persona reciba apoyo emocional de su círculo cercano para fortalecer su convicción.
Reemplazo de nicotina
- Proporciona nicotina en dosis controladas sin los componentes dañinos del cigarro (como alquitrán o monóxido de carbono).
Opciones disponibles
- Chicles de nicotina:Se encuentran en farmacias.
- Parches de nicotina:Disponibles solo a través de compras por internet.
Su uso recomendado es como refuerzo para reducir la ansiedad por fumar, disminuyendo gradualmente la dependencia.
Tratamientos farmacológicos
Bupropión:
- Un antidepresivo que aumenta las probabilidades de dejar de fumar.
- Indicado para personas con alta dependencia (más de 10 cigarrillos diarios).
- Ayuda especialmente con el manejo del síndrome de abstinencia.
Tiene la contraindicación de no estar recomendado para personas con epilepsia debido al riesgo de crisis epilépticas.
Vareniclina (Chantix o Champix):
- Actualmente no disponible en Chile, pero distribuida gratuitamente en Reino Unido como parte de su estrategia nacional contra el tabaquismo.
Hipnoterapia
Técnica que utiliza estados de concentración profunda para abordar la relación del paciente con el tabaco.
Su eficacia no cuenta con amplio respaldo científico, aunque algunos pacientes reportan buenos resultados. Se recomienda como complemento a tratamientos médicos tradicionales.
Ejercicio físico
Ayuda a estimular áreas del cerebro relacionadas con el deseo de fumar y se sugiere como parte de un enfoque integral para reforzar la abstinencia.
Cigarrillos electrónicos
Aunque ofrece una fuente de nicotina menos dañina que el cigarro tradicional, su uso ha generado una fuerte controversia en la comunidad médica al contener sustancias químicas perjudiciales que favorecen el cáncer de pulmón, por lo que la mayoría de los especialistas no lo recomienda como método para dejar de fumar.