Sonami advierte que precio del cobre podría volver sobre los US$ 3 recién en 2022
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Entrevista con Diego Hernández, presidente del gremio
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Desde la entidad apuntan a estar abiertos a elevar la carga impositiva, siempre que no afecte el margen operacional de las mineras. Dicen que la minería será clave para salir de esta crisis.
"Lo que está pasando en Chile nos afecta a todos también a la industria, que debe ser solidaria con esto. La minería se perfila estratégicamente para salir mejorar la situación".
Tiempos complejos son los que atraviesa el precio del cobre, el que si bien vivió una buena semana cerrando en US$ 2, 7 la libra, se encuentra lejos de las expectativas previstas antes del estallido de la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
Para la minería, las hostilidades entre las dos principales potencias vinieron a reconfigurar la industria, con fuertes efectos en la cotización de los commodities, tales como el cobre.
Esta fue una de las premisas de la Semana de la Bolsa de Metales de Londres, que se vivió a principios de mes y en donde participaron los principales ejecutivos de la minería mundial; entre ellos, Diego Hernández.
El presidente de la Sonami revela que las proyecciones de los expertos se han ajustado, esperando que este año el precio del cobre cierre en unos US$ 2, 7 la libra, para caer a US$ 2,6 en 2020 y subir levemente a US$ 2, 7 en 2021. ¿Superar los US$3? Recién en 2022.
"Cuando se revisan todos los commodities, hay algunos muy atractivos en el corto plazo y otros que no, y el cobre sigue siendo atractivo en una mirada a largo plazo, pero en los balances ya lo están viendo para 2022-23. Cuando se hace el balance entre oferta y demanda está negativo, pero no lo suficiente para que se desequilibre, lamentablemente se ve la mantención de lo que vemos por al menos dos años más", sostiene el líder gremial.
Lo preocupante, dice, es que pese a que se concrete un acuerdo comercial entre las dos potencias, el escenario no volverá a ser como antes, porque a su juicio, el mundo entró a una nueva economía. Y es que la guerra comercial afectó el mercado de las materias primas y la estrategia de crecimiento de China y de otros países, con cambios que son más estructurales. "Todavía somos optimistas, y con una mirada a largo plazo, el cobre es uno de los preferidos, pero el próximo año, no" sentencia Hernández.
En el caso de Chile, apunta a que este año la producción será similar a la de 2018, cerca de las 5,8 millones de toneladas, con una cifra parecida en 2020 cuando entre en operación Spence, lo que puede ayudar a revertir la tendencia y comenzar a aumentar.
Estallido social e impuestos
En medio de la mayor recaudación que se necesita para cumplir con la agenda social anunciada por el Gobierno, surgieron voces que buscan gravar de mayores impuestos a la industria minera.
Ante esa idea, el también expresidente de Codelco se abre a analizar algo de ese estilo, aunque advierte que habría que analizarlo muy bien, ya que la situación de la minería hoy día, en cuanto a competitividad, no es la misma que hace 15 años.
"Estamos en una nueva etapa en la gran minería, después del superciclo, donde nuestras operaciones son competitivas, pero promedio, no son las que tienen los costos más bajos y la competitividad no es de las mejores. Es una etapa que nos tenemos que preocupar mucho del margen operacional y cualquier impuesto que venga a afectarlo no es bienvenido, en la medida que tengamos márgenes positivos y utilidades, claro que hay que ver cuál es la tasa tributaria justa" declara Hernández.
Y es que el ejecutivo apunta principalmente a aquellas faenas que son más nuevas, o que cuentan con leyes de mineral más bajas, en medio además de un lento ritmo de inversión por nuevos proyectos, agradeciendo que los proyectos que hoy están en marcha fueron decididos hace un par de años. "Si hubiese que revisar eso, hoy probablemente no se harían, tanto por el tema interno, como por lo externo".
El líder gremial enfatiza en que debido a la situación por la que atraviesa el país, las empresas van a seguir siendo cautas en los temas de desarrollo de inversión, y respecto de la realidad de los trabajadores de la industria, declara que estos debiesen mantener la continuidad operacional, ya que no hay un motivo de descontento. Y es que los mineros, dice, tienen condiciones mejores que el promedio nacional y no están tan afectados por los temas por los que está protestando la población, como sueldo mínimo, AFP y salud.
"Lo que sí, es que lo que está pasando en Chile nos afecta a todos y también a la industria, que debe ser solidaria con esto. En una situación como la de hoy, la minería se perfila nuevamente como estratégica para poder salir y mejorar la situación que tenemos hoy, porque el cobre es un producto de exportación que nos permite traer divi-sas, las empresas pagan impuestos, los empleados pagan impuestos, etcétera".
Por último, Hernández apunta a que la crisis social va a cambiar la agenda que estaba enfrentando la industria, con varios temas ambientales sobre la mesa, como el posible cierre de Ventanas, el caso de Mina Invierno o la ley de glaciares.
"Estos son temas importantes, que hay que seguir teniendo la disciplina de considerarlos, y son temas que no van a desaparecer, pero la manera de salir de la situación actual es respetando la institucionalidad, porque si la echamos por la borda, ahí nos va a costar muchísimo solucionar estos temas, poder reordenar el país y ponerlo en una senda de crecimiento, que es lo que todos quieren" remata.
"Estamos en una nueva etapa en la gran minería, después del superciclo, donde nuestras operaciones son competitivas, pero promedio", dice Diego Hernández.
FUENTE: El Mercurio
Fecha 11-11-2019