Se dijo de la SONAMI esta semana

Presidente de Sonami se reintegra a debate público

A través de un video y aún en Panamá, el presidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami) reapareció públicamente este jueves, luego de las complicaciones de salud que enfrentó, agradeciendo las numerosas muestras de cariño recibidas y adelantó que en los próximos días volverá al país.

Declaraciones a programa AGENDA ECONÓMICA de CNN

Declaraciones a programa 24 HORAS de TVN

Sonami manifiesta “incertidumbre” tras anuncio de la Estrategia Nacional del Litio

Luego del anuncio del presidente Gabriel Boric, el sector minero pidió más participación de privados en el proceso. Cristián Argandoña, presidente (s) de Sonami, dijo en CNN Chile: “Se habla de una estrategia, pero hay que conocer cuáles son los objetivos de corto, mediano y largo plazo, a objeto de entender bien el alcance de la misma”.

Ante el anuncio de la Estrategia Nacional del Litio que realizó el presidente Gabriel Boric, el presidente (s) de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), Cristián Argandoña, comentó en Agenda Económica de CNN Chile que, como entidad, “nos quedamos con bastante incertidumbre”.

“El día jueves pasado el mensaje del presidente fue un mensaje donde le pidió a todo el empresariado la colaboración, el trabajo colaborativo, y en la noche aparece un discurso que va un poco en una línea muy distinta a lo que había planteado en la mañana. En la línea del control, que no lo especificó”, sostuvo.

En ese sentido, el líder gremial manifestó que “materias tan relevantes como las que estamos discutiendo requieren de un nivel de precisión importante para, justamente, no generar estas reacciones de los mercados”.

“No es solamente que Sonami lo entendió una manera, el mercado en general lo entendió así, y eso lo comprueba la caída relevante, importante y muy significativa en el valor de las acciones de varias empresas, particularmente SQM, donde se estima en US$ 1.650 millones la pérdida del capital bursátil. Entonces, son mensajes que provocan impactos realmente muy significativos y que hay que hacerse cargo de eso”, agregó.

De este modo, Argandoña dijo que “se habla de una estrategia, pero hay que conocer cuáles son los objetivos de corto, mediano y largo plazo, a objeto de entender bien el alcance de la misma, y ver cómo cada una de las empresas se puede involucrar en esa materia”.

Dulce y agraz: Un año intenso para el país

Por: Crlstlán Argandoña, presidente (s) de la Sociedad Nacional de Mlnerfa (SONAMI).

La aprobación de un proyecto importante; la celebración de los 40 años del Código de Minería; un nuevo escenario constitucional; y nuevas regulaciones, entre otros escenarios.

«Recibimos con satisfacción la noticia que el Comité de Ministros haya aprobado el Proyecto Los Bronces Integrado de Anglo American que Involucra una inversión de  US$ 3.500 millones.

Esta cuantiosa inversión generará una producci6n de cobre de 150 mll toneladas, en la etapa de construcción empleará 2.850 trabajadores y 2.000 puestos de trabaJo en operación».

No cabe duda que este año está siendo intenso para el país y, por cierto, para nuestro sector. A la preocupante realidad que vivi­mos diariamente con la delincuencia y el crimen organizado, se agrega la incertidum­bre respecto al comportamiento de la eco­nomía y el nuevo proceso constitucional que nos llevará nuevamente a las urnas el próximo 7 de mayo.

En el ámbito minero este primer cuatri­mestre del año ha sido de dulce y agraz. En primer lugar, recibimos con satisfacción la noticia que el Comité de Ministros haya apro­bado el Proyecto Los Bronces Integrado de Anglo American que involucra una inversión de USS 3.500 millones. Esta cuantiosa inver­sión generará una producción de cobre de 150 mil toneladas, en la etapa de construc­ción empleará 2.850 trabajadores y 2.000 puestos de trabajo en operación.

El proyecto contempla altos estándares de sustentabilidad para evitar la afectación de glaciares, incluyendo una operación subterránea para no intervenir la superfi­cie como también la adopción de una serie de medidas de efecto local para el control de emisiones.

El proyecto LBI no genera un riesgo para la salud de las personas por emisiones de material particulado y se ha diseñado sobre la base de criterios socio ambientales, apor­tando antecedentes técnicos y proponien­do medidas eficientes y efectivas para garantizar aquello.

Este año, también celebraremos los 40 años del Código de Minería, un instrumento jurídico que ha otorgado certeza y pro­tección, tanto al derecho del descubridor como a la propiedad minera constituida.

En nuestro Código, que ha sido admira­do y copiado a nivel internacional, tuvieron activa participación importantes abogados, entre los cuales resaltan Juan Luis Ossa y Samuel l.ira. ex ministro de Minería. No cabe duda que ellos jugaron un rol clave en la elaboración y promulgación de este cuer­po jurídico.

Asimismo, se ha iniciado un nuevo proce­so para elaborar una renovada Constitución, que como decían algunos sea «la casa de todos», y permita poner fin a la incertidum­bre que ha caracterizado este periodo.

En ese sentido esperamos, que luego de la fracasada experiencia de la Convención Constitucional, surja un texto que, en primer lugar, reconozca y valorice el sistema demo­crático imperante en Chile, con la debida separación de los distintos poderes del Estado, el respeto al derecho de propiedad y otor­gue certeza a todos los sectores del país.

Nosotros, como gremio representativo de la pequeña, mediana y gran minería metáli­ca y no metálica, estamos disponibles para participar y concurrir a exponer nuestra opi­nión al Consejo Constitucional que surja a partir de mayo próximo.

Pero nuestras preocupaciones no sólo se centran en la Carta Magna, sino también en el royalty minero.

El ministerio de Hacienda presentó nue­vas indicaciones y si bien reconocemos la disposición del ministro Marcel en cuanto a alcanzar un acuerdo en materia de royalty minero, SONAMI estima que aún sigue sien­do muy alta la carga tributaria propuesta en las últimas indicaciones al proyecto de ley. El establecer u na carga tributaria potencial máxima de 48%, es aún alta y aumentará el riesgo de perder flujos de inversión y de con­tinuar perdiendo competitividad.

Actualmente la carga tributaria en nuestro país es de 38% y hay espacio para llevarla a rangos, mayores, que no superen el 43%. Pretender porcentajes superiores a ese, des­truirá valor y la medida, finalmente, irá en contra del recaudador ya que habrá menos actividad y por ende menos recursos para atender ta agenda social del país.

Este nivel de tasas que se propone nos sitúan por sobre nuestros competidores directos (Australia, Canadá y Perú), que tie­nen tasas impositivas efectivas que oscilan entre el 36,4% y 41,7%, como lo indica un reciente estudio del Fondo Monetario Internacional.

Esperamos que los integrantes de la Comisión de Hacienda puedan alcanzar un acuerdo con el gobierno, para no afectar a Chile y su minería, especialmente a aquellas empresas de costos más altos, que en un escenario de alta carga tributaria podrían ver peligrar su subsistencia.

Chile necesita generar condiciones para impulsar el crecimiento de forma urgente, ya que para lograr las metas de carbono neu­tralidad hacia 2050, comprometidas en el Acuerdo de París por 195 países, el mundo necesitará invertir 1,2 trillones de dólares en minería y de ello el 58% es en Cobre y 7% en Litio. NO PERDAMOS ESTA OPORTUNIDAD.

40 años del Código de Minería, cuatro décadas de desarrollo para Chile

El Código de Minería vigente hoy confirmó como principio fundamental que el Estado es el propietario de los recursos mineros y que es quien define las condiciones de explotación, mediante normas específicas y, especialmente, las concesiones mineras.

Análisis: CRISTIÁN ARGANDOÑA, PRESIDENTE (S) DE LA SOCIEDAD NACIONAL DE MINERÍA.

Este año, el Código de Minería, conjunto de normas que rigen la principal actividad económica del país, cumplirá 40 años. Y, a nuestro juicio, es motivo de celebración y de análisis. Este es el principal instrumento que ha permitido desarrollar esta actividad durante cuatro décadas, concretar proyectos de gran importancia y contribuir con empleos de calidad y recursos al fisco de Chile.

Este cuerpo legal comenzó a regir en 1983 y representó un sustantivo avance, porque en su espíritu se reconocían las nuevas condiciones globales en que se desarrollaba (y se desarrollaría) la minería. Así, se dio cuerpo a una institucionalidad que otorgaba certezas y garantías a quienes deseaban invertir en el país. Ello, a partir de la innegable realidad que la minería moderna exigía, inversiones de gran escala y apostar por períodos de largo plazo para recuperar la inversión.

El Código de Minería vigente hoy confirmó como principio fundamental que el Estado es el propietario de los recursos mineros y que es quien define las condiciones de explotación, mediante normas específicas y, especialmente, las concesiones mineras. De hecho, en el conjunto de normas se incluye con rango constitucional a dichas concesiones. Ello, en la práctica, implicó una garantía fundamental para evitar que estas estuvieran sujetas a cambios en los ciclos políticos o a ventajas electorales transitorias.

A propósito de concesiones mineras, nuestro país tiene un sistema que ha sido reconocido como un acierto para el desarrollo de la actividad y la limitación de la injerencia política. Ello, porque a diferencia de otros países, en Chile la propiedad minera no está sujeta al criterio de las administraciones de turno o de los ciclos políticos. El sistema con que contamos permite que cualquier interesado/a en explorar o explotar un área pueda concurrir al sistema judicial y presentar un pedimento, dando así inicio a un proceso reglado y transparente para lograr la concesión.

Pilar principal

Ciertamente, el Código de Minería ha requerido ajustes con el pasar de los años, y probablemente los requerirá en el futuro. Sin embargo, las bases y principios rectores de este conjunto armónico de normas son el pilar principal del desarrollo actual y futuro de nuestro sector, atendido los enormes desafíos que el mundo debe enfrentar para lograr la carbono neutralidad, en el que, por cierto los minerales tienen un papel fundamental.

En la actualidad, el marco normativo y las condiciones institucionales tienen un peso mucho mayor al que poseían hace algunas décadas, a la hora de evaluar un proyecto de inversión en minería. Esto, porque las condiciones geológicas de nuestro país no aventajan por tanto a otras potencias mineras. Después de años de explotación de los minerales, especialmente cobre, las leyes han caído y, por lo tanto, los costos de extracción se han elevado. De este modo, la rentabilidad se defiende en los márgenes operacionales. En consecuencia, las condiciones para desarrollar la actividad determinan si será posible recuperar las cuantiosas inversiones.

Efecto multiplicador

En el contexto actual es especialmente significativo repasar la historia de nuestro Código de Minería, que fue promulgado con ocasión del centenario de nuestra organización. En el pasado proceso constitucional, entre otras normas extremas que desmantelaban este conjunto de regulaciones, se propuso -en los hechos- despojar de rango constitucional al régimen de concesiones. En otras palabras, se pretendió derribar el pilar de desarrollo de la actividad. Hoy, en plena discusión en el nuevo proceso, que el próximo 7 de mayo elegirá a los consejeros constitucionales, confiamos en que se reconozca -así como lo hace la comunidad minera internacional- que este Código es beneficioso para potenciar el rubro y sus inversiones, con el propósito de aportar al desarrollo económico y social del país.

Como país debemos promover la inversión minera, por el efecto multiplicador que esta genera y debido a que la inversión que realicemos hoy es la base del crecimiento futuro.

Para poder afrontar los desafíos de la carbono-neutralidad, comprometidos por 195 países en el Acuerdo de París, se requerirá producir dos a tres veces más cobre que el que se produce en la actualidad en el mundo. Chile tiene en ese aspecto una gran oportunidad, que no debemos desperdiciar.