Prevenir Riesgos de Accidente en el Lugar de Trabajo

EDITORIAL

Todos queremos trabajar en un ambiente seguro y sano.

Tenemos claro que seguridad y salud son preocupaciones clave para las personas y para las empresas y que todo trabajador que sale de su hogar hacia el trabajo quiere regresar a su hogar sano y salvo, terminada su jornada.

Sabemos también que nadie quiere escuchar que un ser querido o un compañero no volverá nunca a casa o al trabajo.

Sin embargo, los accidentes siguen ocurriendo, a pesar de la preocupación que despliegan trabajadores y empresa para evitarlos.

¿Por qué ocurre esto?

Porque al final, en el momento mismo de efectuar la tarea, la seguridad depende de las precauciones que el trabajador adopte antes de realizar el trabajo. Es ese el momento en que se determina lo acertado de la decisión que ha tomado.

Desafortunadamente, variados factores distraen y atentan contra la seguridad de una tarea:

  • La experiencia, el uso, la edad, hacen que el trabajador olvide o minimice los peligros que lo rodean.

  • Estrés, sueño, preocupaciones, enfermedades, sobrepeso, no estar en forma, pueden ser tremendamente justificados, pero -querámoslo o no- afectan la concentración, restan energías y distraen la mente.

  • Decisiones simples como usar un andamio como escalera; emplear un alicate en vez de la herramienta adecuada; levantar objetos pesados a pulso en vez de buscar una carretilla o no usar el pasamano de la escala exponen a caídas, lesiones, fracturas o esguinces.

  • Olvidos como no fijarse en las salidas de emergencia o en el lugar donde se encuentra el extintor de fuego, exponen a quedarse atrapado en un incidente o a sufrir quemaduras.

Estos descuidos son “atajos mentales” que equivocadamente nos hacen pensar que ahorraremos tiempo o que disminuiremos el estrés de una tarea, pero lo único que hacen es aumentar enormemente la probabilidad de accidentarnos.

Por eso, hago este llamado a mantenernos en estado de alerta del entorno, tomar consciencia de las tareas que se van a realizar y reducir las condiciones que pueden contribuir a la ocurrencia de accidentes que pueden resultar de extrema gravedad.

Se hace ineludible, entonces:

  • Focalizarnos en el trabajo que se va a realizar y en sus riesgos inherentes;

  • Reducir los factores de tensión en el entorno laboral;

  • Usar siempre, todos los EPP;

  • Utilizar herramientas adecuadas y en buen estado;

  • Mantener una postura adecuada al trabajo que se realiza; y

  • Advertir a las jefaturas y supervisores de condiciones inseguras existentes.

Son conductas diarias, simples, que todos conocemos, pero que por alguna razón se pasan por alto al momento de ejecutar la tarea.

Por nuestra salud y nuestra seguridad, debemos hacer el esfuerzo de recordarlas, justo antes de realizar el trabajo.

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