IA, Informática y ciberseguridad
Desafíos de la WiFi y de los LTE en un entorno industrial
- Expertos analizan las distintas redes existentes para uso en entornos industriales y destacan la importancia de contar con una red confiable aporte en forma efectiva a mejorar la productividad, eficiencia y rentabilidad de las operaciones.
Wi-Fi
La Wi-Fi ofrece beneficios de capacidad y la alta velocidad esenciales para responder a la creciente demanda de dispositivos móviles, no obstante, la señal de Wi-Fi se debilita a medida que el cliente móvil se alejan de los puntos de acceso, provocando pérdida de datos críticos.
LTE o 5G
La alternativa de redes de Evolución a Largo Plazo (LTE), cuyas versiones más actualizadas se conocen como 5G, aunque ofrecen beneficios en áreas urbanas y suburbanas, su aplicación en IoT Industrial y Minería 4.0 enfrenta problemas de cobertura y fiabilidad de datos, especialmente en entornos complejos como plantas de procesamiento y áreas operacionales.
LTE privado
Esta opción, que ofrece control sobre la asignación de ancho de banda, enfrenta desafíos de costos, disponibilidad de frecuencias y mantenimiento de la red.
Redes de malla inalámbrica
En este escenario, las redes de malla inalámbrica aparecen como una solución alternativa y complementaria a Wi-Fi y LTE.
Son redes versátiles, escalables y pueden auto-optimizarse, lo que las hace adecuadas para entornos industriales dinámicos, puesto que proporcionan conectividad móvil, escalable y de alta capacidad, con un ancho de banda superior y una latencia menor en comparación con LTE privado.
Además, son más económicas de comprar y mantener.
La Minería 4.0 y el aumento del riesgo cibernético
- La creciente incorporación de IA, dispositivos IoT y sistemas fuera del control de TI en la operación minera está abriendo una brecha de vulnerabilidad a los criminales cibernéticos, concentrados hasta ahora en sectores financieros y de gobierno.
El aumento en la frecuencia y sofisticación de los ciberataques, a nivel mundial, ha ido apuntando el foco hacia una América Latina cuya conciencia de ciberseguridad ha demostrado hasta ahora ser escasa.
Sólo en Chile, entre enero y septiembre de 2023, se registraron más de 740 mil ciberataques, lo que representa más de 2 mil ataques cada día, duplicando la cifra del año anterior.
Ataques a los sistemas empresariales
Los expertos destacan la necesidad de invertir en seguridad digital como un pilar clave en la continuidad del negocio y llaman a poner atención en prácticas ciberdelictivas como:
Ransomware
- A pesar de los esfuerzos para combatirlo, el secuestros de información persiste y evoluciona con la aparición de nuevas familias de ransomware y el uso de tácticas más sofisticadas por parte de los criminales.
Venta ilegal de acceso a sistemas corporativos
- Mediante ingeniería social avanzada, los ciberdelincuentes logran tener acceso a sistemas corporativos, que vendidos a terceros son utilizados con fines maliciosos, lo que resalta la importancia de la concienciación y medidas de autenticación más estrictas en las empresas.
Fraudes y robo en criptomonedas
- Aprovechando la confianza y falta de conocimiento de la población en este ámbito, utilizando técnicas de deep fake, los delincuentes han aumentado el robo de criptomonedas, principalmente a través de estafas o secuestros de información que exigen criptomonedas como rescate.
Más herramientas para el crimen
- La democratización y simplificación de la tecnología ha facilitado que los ciberataques sean más fáciles de llevar a cabo, con tácticas avanzadas disponibles incluso para atacantes poco sofisticados.
Malware especializado bancario
- Los expertos advierten de un aumento en troyanos bancarios específicamente dirigidos a la región, con un crecimiento radical en estos ataques en los últimos dos años, lo que representa una amenaza significativa para la seguridad financiera.
Amenazas a la nube
- La migración de soluciones e información empresarial a la nube, se ha vuelto un objetivo principal para los atacantes, resaltando la importancia de configuraciones adecuadas y medidas de seguridad para proteger los datos en la nube.