El 25% de los chilenos no entiende o no sabe cómo funciona el internet de las cosas
- Según estudio de Kaspersky, pese al fuerte avance de la digitalización, donde un 61% de las empresas utiliza plataformas loT, casi un tercio de los chilenos no reconoce lo que es y lo que implica utilizar el IoT.
- Aunque la interconexión virtual de los dispositivos se encuentra altamente presente en los hogares y trabajos, con sus múltiples beneficios, existen diversos factores que se deben tener en cuenta para poder disfrutar de sus atributos sin exponerse a las vulnerabilidades cibernéticas.
La pandemia trajo consigo una revolución en el comportamiento digital de las personas y una convivencia con la tecnología que ha abierto las puertas del hogar al internet de las cosas (loT) y sus beneficios.
Es cada vez más recurrente encontrar en las casas distintos artefactos con sistemas de voz integrados, conexión a electrodomésticos, a parlantes y ampolletas inteligentes o a las smart TV, todos dispositivos encargados de facilitar la vida mediante diversas tareas automatizadas del diario vivir.
Candela Besprosvan, socia adjunta de Tecnología de EY, explica que «al hablar de internet de las cosas nos referimos a la interconexión digital de las cosas y objetos utilizando una red, equipados con sensores, software y otras tecnologías que permiten la transmisión e intercambio de datos, lo cual habilita a las organizaciones a capturar nueva información, detectar patrones, hacer recomendaciones, mejorar eficiencias e incluso experiencias para los usuarios».
Pero pese a la alta penetración, según el estudio regional «Iceberg Digital» de Kaspersky, uno de cada cuatro chilenos (25%) no entiende o no sabe cómo funciona el internet de las cosas.
Conexiones vulnerables
Más de un 46% de personas ignora que sus dispositivos conectados pueden ser hackeados a través del router.
A esto se suma que el 35% no sabe que los aparatos loT cuentan con parches de seguridad para su protección, mientras que 34% ni siquiera sabe qué son estas herramientas.
Para combatir las vulnerabilidades, Fabio Assolini, analista sénior de Seguridad en Kasperky, recomienda «cambiar las contraseñas predeterminadas de los dispositivos inteligentes por una más compleja, junto con deshabilitar las administraciones remotas, mantener instaladas las actualizaciones del firmware constantemente e incluso utilizar una red virtual privada (VPN, por sus siglas en inglés)».
Cristián López, CEO de Unitti, comenta que «la importancia respecto de la red doméstica con los dispositivos conectados es primordial, debido a que mediante las redes los dispositivos logran alcanzar una mayor capacidad de producción y, de esta forma, se logra la interoperabilidad de los productos adquiridos en el hogar».
Electrodomésticos inteligentes
Mediante la domotización del hogar se puede desde programar o realizar remotamente el encendido de luces hasta contar con electrodomésticos inteligentes.
Ejemplo simple y cotidiano son los dispositivos que detectan movimientos o sonidos y generan acciones en consecuencia, como encender una luz, enviar una notificación, comenzar a grabar, etc., todo esto disparado a partir de un simple sensor conectado a internet.
Víctor Toscani, gerente de Tecnología de Cisco Chile, comenta que «la loT ofrece un sinfín de posibilidades, siendo la promesa principal hacer más eficiente los procesos para mejorar la calidad de vida de las personas. Además de controlar diversos objetos en cualquier momento y desde el lugar que desees, hace más eficiente el uso de energía, brinda seguridad y crea ambientes amigables».
El monitoreo remoto de la casa es una posibilidad gracias a la tecnología
Existen cerraduras biométricas que funcionan con la huella dactilar y que permiten utilizar una clave o una tarjeta con las que el propietario puede registrar el ingreso y la salida de las personas a través de una aplicación. T
También existen citófonos inteligentes, en los que se puede contestar sin estar en la casa y sistemas de riego predictivos que permiten cortar su funcionamiento cuando llueve.
Retorno a las oficinas
Ante el retorno paulatino a las oficinas y puntos físicos de trabajo, las empresas se han visto obligadas a poner en práctica diversas medidas para resguardar la salud de sus colaboradores, implementando sistemas de toma de temperatura, uso de mascarilla obligatorio e incluso la medición de CO2 para evitar contagios en espacios cerrados, protocolos sanitarios que incluso pueden ser llevados a cabo de la mano de las tecnologías y el monitoreo remoto.
Pablo de Uría, socio de PwC Chile, explica que, «aplicando loT y usando un conjunto de cámaras con capacidad de medir temperatura al ingreso, se podría mantener el proceso de ingreso sin cambios. En caso de temperatura alta, utilizando reconocimiento facial, se puede alertar al colaborador, a su supervisor y al equipo de Recursos Humanos. El mismo sistema podría usarse, con ayuda de inteligencia artificial, para determinar si el colaborador se higieniza las manos con el dispensador de alcohol-gel».
Otro uso es el aplicado a labores de limpieza en una logística conectada con productos inteligentes que den seguridad en diferentes aspectos laborales, además de conectar los problemas del mundo cotidiano con las soluciones que puede aportar el mundo tecnológico, creando nuevos negocios dentro de la empresa.
Francisca Heine, gerenta de Marketing y Nuevos Negocios de ITQ Latam, comenta que esta interconexión de dispositivos es tan amplia que incluso permite el trabajo remoto a distancia en tiempo real. «La telemetría permite que trabajes maquinarias desde un puesto virtual. El aporte es gigante, pero las vulnerabilidades y peligros también, por eso las empresas deben invertir en firewall, VPN y DNS, por citar algunas medidas. Es clave concientizar a las personas, ya que hoy las empresas también quedan expuestas«, dice.