Del cuidado de la salud
Regreso al trabajo: Comer sano te hace más productivo
Especialistas en nutrición explican porqué una buena alimentación mejora la concentración y el estado de alerta en un período en que se vuelve a la rutina de los quehaceres diarios después de las vacaciones.
En términos generales se recomienda
- Preferir alimentos naturales preparados en casa y evitar los alimentos procesados.
- Tomar un desayuno moderado, pero de calidad para animar el inicio del día.
- Evitar jornadas intensas y continuas y hacer pausas activas para realizar actividades físicas.
¿Qué alimentos preferir?
Los que contengan Omega 3
- Presente en los pescados y mariscos como salmón, atún, sardinas, camarones y almejas.
- Avena, cereales integrales, legumbres (lentejas, garbanzos, porotos), quinoa, centeno, arroz y fideos integrales, que contienen carbohidratos complejos para una liberación gradual de energía.
- Frutos secos, té, huevos y alimentos fermentados como la kombucha, que contribuyen a la reparación de células cerebrales y reducen la inflamación.
- Frutas y verduras ricas en antioxidantes, como frambuesas, frutillas, kiwi, tomates, pepino, betarraga, melón, pimentón y sandía, que ayudan a prevenir el envejecimiento prematuro y enfermedades degenerativas.
- Frutos secos y aguacate por su contenido de magnesio, esencial para el funcionamiento del cerebro.
- Chocolate amargo, que contiene teobromina y triptófano para mantener la concentración y mejorar el flujo sanguíneo.
Beber agua
- Se recomienda beber no menos de 2 litros de agua al día por que el consumo insuficientes de agua afecta la concentración y la memoria sw corto plazo.
Evitar
- Alimentos procesados con altos niveles de azúcares añadidos y grasas de mala calidad presentes en hamburguesas, pizzas, frituras, pasteles y tortas, que causan somnolencia y sensación de cansancio que disminuyen la concentración y el estado de alerta.
Longevidad: otro beneficio de alimentarse bien
- Investigación realizada en EE.UU en un universo de 50 mil participantes, publicada por The American Journal of Clinical Nutrition, sugiere que obtener la mayor parte de la proteína de fuentes vegetales, junto con una pequeña cantidad de proteína animal, favorece la salud y la longevidad.
Los datos recopilados revelan que, en especial, las mujeres que consumen más proteínas de origen vegetal tienen menos probabilidades de desarrollar enfermedades crónicas y envejecen de manera más saludable.
De igual modo, los resultados sugieren que un mayor consumo de proteínas vegetales se asoció con un menor riesgo de enfermedades cardíacas, cáncer, diabetes y deterioro cognitivo y mental.
Fibra y antioxidantes
El estudio menciona que las proteínas vegetales tienen un alto contenido de fibra y antioxidantes, lo que puede explicar sus efectos protectores contra enfermedades cardiovasculares y cáncer.